En los últimos años, los conflictos híbridos, como los enfrentamientos entre Israel y grupos como Hezbolá y Hamás, las intervenciones de Irán en Yemen a través de los hutíes, y la guerra en Ucrania, han generado un profundo análisis sobre las tácticas y tecnologías que han definido el campo de batalla moderno. Las lecciones aprendidas de estos escenarios revelan un enfoque cada vez más complejo de la guerra, donde la combinación de sistemas convencionales y asimétricos ha alterado las dinámicas estratégicas y operativas.
1. Estrategias Asimétricas y Uso de Tecnología Avanzada
Los actores no estatales como Hezbolá, Hamás y los hutíes han perfeccionado el arte de la guerra asimétrica, empleando misiles balísticos, cohetes de corto y medio alcance, y drones kamikazes para desafiar a fuerzas tecnológicamente superiores.
La integración de estas armas ha puesto a prueba la capacidad de los sistemas de defensa aérea israelíes, como la Cúpula de Hierro, David’s Sling y la Arrow System.
Las lecciones clave incluyen:
- Estrategia de saturación: El lanzamiento simultáneo de múltiples cohetes y misiles de corto alcance para saturar sistemas de defensa ha mostrado que incluso las defensas aéreas avanzadas pueden verse abrumadas. La capacidad de adaptación rápida y la redundancia en sistemas de defensa son esenciales.
Nuevamente, se presenta la disyuntiva entre calidad y cantidad de los misiles y el uso de cohetes y misiles por parte de actores no estatales y que incluso hoy en dia son limitados para algunos ejercitos regulares de algunos países.
- Drones y Guerra Electrónica (EW): Los drones han revolucionado las operaciones ofensivas y de reconocimiento. Tanto en el Medio Oriente como en Ucrania, se ha visto que los drones no solo proporcionan una ventaja táctica para observación y ataque de precisión, sino que también pueden ser un recurso de bajo costo con un alto impacto estratégico. La guerra electrónica se ha convertido en un campo crítico para neutralizar estos drones y proteger las infraestructuras clave.
Los expertos siguen debatiendo sobre si los UAV y drones están generando cambios a nivel táctico o estratégico, pero los efectos psicológicos que provocan estos enjambres entre los combatientes y, por tanto, entre quienes toman las decisiones operacionales se está traduciendo en la inmovilidad de las unidades más cercanas a las líneas enemigas.
En Ucrania, enjambres de drones de pequeñas dimensiones están inmovilizando a las tropas de ambos bandos destruyendo incluso a los más avanzados blindados como el T-90 a un coste infinitamente inferior y con mayor ratio de eficacia, de lo que costaría emplear un misil antitanque o un ASM de corto y mediano alcance.
- Erosión de la imagen mediática del enemigo: La erosión de la imagen mediática del enemigo en los conflictos modernos ha tomado un papel central en la dinámica de la guerra híbrida. Este fenómeno se refiere a cómo la percepción pública y mediática de un enemigo se manipula y se transforma mediante campañas de información y desinformación, afectando tanto la moral de las fuerzas armadas como la opinión internacional. Dentro de las principales estrategias se encuentran las estrategias de deslegitimación, con el uso de propaganda narrativa, desinformación y fake news. El uso de redes sociales para adelantar la guerra de información. Para humanizar las consecuencias y manipular a la opinión pública.
En la guerra en Ucrania ha demostrado cuán eficaz puede ser la erosión de la imagen mediática de un enemigo en la era digital. Ucrania ha desplegado una campaña mediática exitosa, presentando a Rusia como un agresor brutal y destacando historias de resistencia y heroísmo ucraniano. Las imágenes de edificios destruidos, refugiados y soldados defendiendo su patria han generado una ola de apoyo internacional hacia Ucrania y han aislado a Rusia económicamente y políticamente.
Por otro lado, Rusia ha intentado contrarrestar esta narrativa presentando argumentos sobre la “desnazificación” de Ucrania y protegiendo a las poblaciones rusoparlantes. Sin embargo, estas narrativas no han sido tan efectivas fuera de su propia esfera de influencia debido a la fuerte contraofensiva mediática ucraniana y el acceso casi universal a medios occidentales.
La erosión de la imagen mediática de un enemigo no solo influye en el apoyo público y político durante el conflicto, sino que también afecta las relaciones futuras. Los países que logran proyectar a sus adversarios como amenazas deshumanizadas o injustas pueden justificar medidas más duras y obtener mayores concesiones en negociaciones internacionales. Sin embargo, este enfoque también puede tener consecuencias a largo plazo, ya que la demonización extrema dificulta la reconciliación y perpetúa el ciclo de hostilidades. En cuanto a la guerra en Medio Oriente basta con ver los diferentes canales de Youtube que defienden los logros y validan las iniciativas de cada uno de los bandos. Y como el esfuerzo de los actores no estatales han permeados los foros internacionales como la ONU.
2. Operaciones Coordinadas y Defensa Multicapa
La guerra en Ucrania ha proporcionado un laboratorio en tiempo real para observar cómo los sistemas de defensa aérea multicapa, como los NASAMS y los S-300, son esenciales para proteger objetivos estratégicos de misiles de crucero y balísticos.
S-300 |
NASAMS |
Las lecciones incluyen:
- Defensa Multicapa Eficaz: Ucrania ha demostrado la importancia de una red de defensa aérea que pueda interceptar amenazas de diferentes tipos y altitudes. Desde drones kamikazes Shahed-136 hasta misiles balísticos Iskander, la capacidad de coordinación entre sistemas de radar y plataformas interceptadoras es crítica.
- Estrategias de Desgaste y Logística: Las fuerzas rusas han empleado tácticas de desgaste, lanzando oleadas de misiles de crucero Kalibr y drones para impactar la infraestructura crítica de Ucrania. Esto ha resaltado la necesidad de reservas logísticas y de sistemas de defensa aérea resilientes. La constante de estos conflictos es debilitar al enemigo a través de un proceso prolongado de desgaste, cuyo objetivo es agotar los recursos materiales, económicos y humanos del adversario hasta el punto en que ya no pueda continuar combatiendo de manera efectiva. En lugar de enfocarse en lograr victorias rápidas y decisivas, la estrategia principal de una guerra de desgaste es erosionar gradualmente la capacidad del enemigo para luchar. El recurso humano comienza a determinar el alcance y éxito de las operaciones. Tanto en Israel como en Ucrania se comienza a limitar la capacidad de respuesta y el alcance de las operaciones al número de tropas disponibles y a la moral de las mismas. Pero también a la disponibilidad de misiles SAM y SSM en stock, municiones y reservas de blindados. Parte de esa limitación se ve reflejada en la intención de involucrar a terceras partes dentro del conflicto, como en el caso de las tropas Nor Coreanas por parte de Rusia.
3. Supremacía Aérea y Ataques de Precisión
El uso de cazabombarderos y aviones de ataque ha seguido siendo vital en operaciones convencionales, aunque los conflictos híbridos han mostrado limitaciones y desafíos. Israel ha demostrado cómo aviones como el F-35I Adir se utilizan eficazmente para ataques de precisión, destruyendo objetivos de alto valor mientras se evaden los sistemas de defensa aérea de Siria e Irán.
En Ucrania misiles como el Neptune 360 han hundido buques tan importantes como el Movska.
Las lecciones en este ámbito son:
- Stealth y Penetración: Los cazas de quinta generación con tecnología furtiva han probado ser indispensables para realizar misiones en entornos hostiles densamente defendidos. La capacidad de atacar objetivos sin ser detectados ha cambiado la naturaleza de las campañas aéreas.
- Alineación con Drones: La integración de drones junto con cazas permite misiones coordinadas donde los drones actúan como señuelos o sistemas de observación, protegiendo a los activos más valiosos.
4. Sistemas de Misiles: Factor de Equilibrio y Amenaza
La proliferación de misiles de crucero y balísticos, especialmente por parte de Irán y Rusia, ha cambiado las reglas del juego. Los misiles de largo alcance proporcionan la capacidad de impactar objetivos a gran distancia, y su precisión ha mejorado con el desarrollo de tecnologías de guía avanzadas. Los sistemas como los Iskander rusos y los misiles iraníes Fateh-110 se han convertido en herramientas clave en la disuasión y el ataque.
- Lecciones sobre Disuasión: Las fuerzas armadas necesitan desarrollar la capacidad para responder y disuadir estos ataques. Esto incluye tanto sistemas de defensa como la capacidad de contraataques precisos y devastadores.
- Importancia del Ataque Preventivo: En el caso de Israel, se ha priorizado el uso de inteligencia avanzada para detectar y neutralizar amenazas antes de que se conviertan en un peligro inminente.
Conclusión
Los conflictos híbridos recientes muestran que el campo de batalla moderno es un entorno en constante evolución, donde la combinación de tecnología avanzada, tácticas asimétricas y la guerra cibernética desafían las estrategias militares tradicionales. Las fuerzas armadas de cualquier país deben invertir no solo en equipos de alta tecnología, sino también en la capacidad de adaptar rápidamente sus doctrinas operativas y fortalecer la resiliencia de sus defensas aéreas y cibernéticas. La integración de recursos como cazabombarderos, drones, y sistemas de defensa multicapa sigue siendo fundamental para enfrentar amenazas dinámicas y complejas.
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